[youtube p9_Tudgl8KE nolink]
De niño prodigio a hombre objeto a activista por los derechos humanos…
El recorrido de Ricky Martin ha llegado mucho más lejos de lo que todos pensamos cuando lo veíamos saltar a fines de los 80 como uno de los chicos de la boy band Menudo.
En ese momento todos creyeron que Ricky, a sus 20 años, quería convertirse en el Luis Miguel portorriqueño, y por un tiempo fue así. Grabó discos de baladas y temas bailables, actuó en teleseries mexicanas y aprovechando que era bilingüe, incursionó en la TV estadounidense.
Pero algo cambió en el camino: elegido para cantar el himno del mundial de fútbol de Francia, Martin lo convirtió en un éxito global, y muy rápido repitió con “Living la vida loca”.
De ahí en adelante, solo Shakira se le compararía en su estatus de latino eminente, que ha mantenido hasta hoy, junto a sus dos gemelos nacidos en agosto de 2008, Matteo y Valentino.
El nacimiento de sus hijos fue un hecho clave, de ahí en adelante Martin dejaría de vivir puertas adentro, publicaría su autobiografía y haría pública su relación con el economista mexicano Carlos González Abella.
Ricky hoy es un abogado por la tolerancia, y así lo manifestó recientemente al dedicar un reciente premio a Daniel Zamudio.