A veces el cansancio nos hace preferir el ascensor a la escalera, pero esta actividad cotidiana es una real ayuda para mantenerse en forma.
Subir los peldaños de la escalera moviliza un total de 28 músculos, mejora la resistencia de nuestro organismo al ejercicio, quema grasa, y por supuesto, tonifica los glúteos, piernas y pantorrillas.
Los expertos recomiendan subir al menos 200 escalones diarios, y si estás cansada, es mejor hacerlo lentamente que usar el ascensor.