Se comprobó que la meditación reduce el deterioro del cerebro. Esta práctica que viene del budismo, y que busca despejar la mente, fue ahora validada por un estudio científico. En la Universidad de California, la UCLA, se hicieron resonancias magnéticas a 50 personas que llevaban meditando durante 20 años, y las comparó con otras 50 que no lo hacían. Todas tenían, en promedio, 51 años y el resultado fue que quienes meditaban perdían menos células de su cerebro que lo normal para su edad. Y es que a partir de los 30 años, este órgano empieza a perder peso y tamaño, un proceso que se hace más lento con la meditación, según los investigadores.