Existen posturas de yoga que inducen al buen dormir, así que si quieres tener dulces sueños, pon atención.
Coloca una almohada junto a la pared, sobre ella, apoya tus caderas, y eleva tus piernas apoyándolas en el muro, hasta formar un ángulo recto con tu tronco. Así, con los pies en alto, quédate un rato, respirando. Esta postura se llama Viparita Karnásana, y ayuda a relajarse. Otra posición, llamada Adomuka Vajrásana, consiste en ubicarse de rodillas, y bajar el tronco hasta apoyar la frente en el suelo, sobre una almohada, con los brazos extendidos y las palmas hacia abajo y también ayuda a dormir mejor.