Una buena forma de hacer ejercicio es caminar rápido. De hecho, un estudio publicado por la Asociación Médica de Estados Unidos, indicó que las personas que caminan a una velocidad de un metro por segundo, viven más que quienes andan más lento. En conclusión, el ritmo de la caminata es un indicador de longevidad. Además, este sencillo ejercicio ayuda a la circulación de la sangre y además quema calorías. Un dato a tener en cuenta.