Nuevos estudios confirman que la dieta mediterránea, con aceite de oliva y frutos secos, mejora la función cognitiva de los adultos mayores. Así lo concluyó un equipo del Hospital Clínico de Barcelona. Científicos examinaron a 447 voluntarios sanos, con una edad promedio de 67 años. A un tercio se le asignó dieta mediterránea con aceite de oliva; a otro tercio, la misma dieta, más una porción diaria de 30 gramos de frutos secos. Al tercer grupo solo se le dio una dieta baja en grasas. Después de cuatro años, los dos primeros grupos vieron mejoradas sus funciones cognitivas, y respondieron mejor a los test neuropsicológicos.