Tras haberse cortado varios dedos, luego de atrapar un dron durante un concierto el sábado en Tijuana, México, el cantante Enrique Iglesias debió ser sometido a una cirugía reconstructiva de la mano, ya que se descubrió que había sufrido una fractura, pero que se espera una completa recuperación.
Iglesias fue atendido con los primeros auxilios para contener la hemorragia, y aunque le aconsejaron poner fin al espectáculo después del accidente, continuó actuando una media hora más frente a los más de 12.000 espectadores.
Según el comunicado de prensa, Iglesias pasará las próximas semanas en reposo absoluto.