Mientras el Príncipe Harry se dedicaba a sus deberes “reales” en Stockports, Inglaterra, en donde participó en una actividad para promover el deporte, conoció a una niña llamado Maisie Stokes.
La pequeña llamó la atención de Harry porque ambos son colorines. En ese momento el hermano del Príncipe Williams se aceró a la niña y le dijo que estaba feliz de conocer a otra pequeña colorina como él, a lo que ella respondió: “Eres muy amable y muy lindo ¿Te estás divirtiendo?”