Amamantar a un recién nacido siempre es una tarea complicada, sobre todo si lo hace una mamá primeriza. Este fue el caso de Rebecca McKeever, quien no quiso darse por vencida al ver que su bebé no se acercaba a su pecho.
Según contó el diario Huffington Post, la mujer botó un poco de calostro en la taza y luego lo absorbió con la jeringa y se lo fue dando a su pequeña en gotitas. A través de las redes sociales varias madres la han felicitado por su decisión y han contado sus propias experiencias con la lactancia.
Actualmente la niña ya se alimenta a través del pezón, por lo que su técnica fue útil para prepararla.
Una foto publicada por 🌺 Rebecca A. McKeever 🌺 (@wisdombird) el