La Duquesa de Cambridge siempre ha sido admirada por su elegancia, sin embargo, hay algo que llama más profundamente la atención de los paparazzis y que aún no se ha podido descifrar.
La esposa del príncipe William ha aparecido en decenas de ocasiones usando banditas o “parches curitas” en diferentes zonas de sus manos.
Como el Palacio de Buckingham nunca ha querido entregar una versión oficial al respecto, han comenzado una serie de especulaciones.
Algunos piensan que Kate podría autoinflingirse heridas debido a una depresión sin tratar, mientras que otros aseguran que se trata simplemente de cortes de papel o momentos de distracción.
La situación cobró más fuerza cuando Middleton apareció junto a su familia para participar en una misa de Navidad llevando otro parche en uno de sus dedos, mientras cargaba a la princesa Charlotte.