Hace unos días los recién casados volvieron de su luna de miel para retomar sus compromisos reales.
Pese a que la reina era la gran homenajeada de este evento, fue Meghan Markle la que se robó todas las miradas.
La duquesa de Sussex, lució un vestido de Carolina Herrera en color rosado claro. Esto generó mucha polémica, porque la ex actriz se saltó los protocolos de vestuario al llevarlo, ya que ella mostró más piel de la necesaria.
Sin embargo, tras esta controversia, muchos críticos de vestuario, aseguraron que la esposa del príncipe Harry se habría inspirado en uno de los más icónicos vestidos de Diana de Gales.
Hace más de 30 años, Lady Di utilizó un diseño de Catherine Walker, el cual estaba hecho en satín rosa pálido y tenía el mismo escote que el de Meghan.
En el año 1997, el vestido fue subastado por más de 17 millones de pesos.