El hombre de 41 años falleció en el mismo lugar en que le había pedido matrimonio a su esposa.
Pesar existe en la realeza europea, luego del trágico fallecimiento del príncipe Georg-Constantin de Saxe-Weimar-Eisenach el sábado pasado, tras sufrir un accidente mientras montaba a caballo en la casa de campo de un amigo, en el Palacio Apethorpe, en Northamptonshire, Inglaterra.
El hombre de 41 años, que vivía en Londres luego de contraer matrimonio en 2015 con la exmodelo inglesa Olivia Page, llegó al lugar para disfrutar de la equitación que era una de sus pasiones.
De acuerdo a la escueta información que se filtró a la prensa, Georg-Constantin cayó del caballo y murió a los pocos minutos. Tres años atrás, en ese mismo jardín el príncipe le propuso matrimonio a su esposa, la princesa Olivia.
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«Con (como le decían sus amigos) fue un jockey brillante, corrió en Cheltenham y donde iba montaba a caballo”, dijo al diario británico Daily Mail Alexander Fiske-Harrison, amigo del fallecido.
«Era un hombre encantador, y aterrizado, no era como otros aristócratas, era un chico tan agradable, no te dabas cuenta que era miembro de la realeza», cerró.
El príncipe Georg-Constantin era el sucesor de la Casa de Wettin y su familia está vinculada a muchas de las casas reales de Europa.