La duquesa de Sussex se atrevió con el tono amarillo.
Desde que se casó con el príncipe Harry, Meghan Markle se ha destacado por su elección en su vestuario. Siempre se había decantado por colores rosa y en tonalidades pastel.
Sin embargo, en la recepción de «Commonwealth Youth» en Marlborough House, en Londres, la duquesa llamó la atención por utilizar un vestido en un llamativo color amarillo.
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La ex actriz llevó un vestido midi en amarillo canario firmado por el diseñador Brandon Maxwell. Pese a que el color de la prenda no se salta ningún protocolo, son pocos miembros de la realeza se han atrevido con anterioridad a lucirlo.
