La ex actriz tendrá que evitar este detalle en los eventos reales.
Antes de convertirse en duquesa, Meghan Markle tuvo que renunciar a sus redes sociales, a su carrera como actriz y al mundo de Hollywood para así poder casarse con Harry.
Gracias al protocolo real Markle no puede cruzar las piernas en público, no puede usar un manicure con colores fuertes, ni usar carteras grandes. Sin embargo, esto no es lo único que está prohibido.
En este caso tiene que ver con la comida. Y es que a la reina Isabel II le molesta enormemente el ajo. Por lo que ninguna comida que se cocina en el palacio tiene este ingrediente.
Esto puede parecer absurdo para la gran mayoría de las personas, para los miembros de la realeza es parte del protocolo y las exigencias que van junto a su título, tal como saludar a las personas dándole la mano o no cruzar las piernas en eventos reales.
Dentro del círculo de la realeza es conocido el odio que la reina tiene por esta hortaliza y tal parece que no es la única, ya que la cebolla también entraría en esta categoría. Es por esta razón que el chef del palacio Darren McGrady, dijo que «nunca tendría ajo en el menú».
Por esta razón, Meghan no podrá consumir ajo en presencia de la reina. Sin embargo, en su casa si podrá utilizarlo, lo que es una buena noticia, ya que la comida favorita de la duquesa de Sussex lleva ajo. Esto lo dejó plasmado en una entrevista que dio en el año 2012, donde expresó que: «Disfruto cocinando los domingos pollo adobado al estilo filipino. Es muy fácil: combinas ajo, soja, vinagre, un poco de limón, dejas que el pollo se marine en esa salsa… y luego lo metes en la Crock Pot», finalizó.