Si bien, la duquesa de Sussex, Meghan Markle, acudió a la ceremonia navideña del año pasado, esta vez lo hizo en su primer año de casada con Harry.
(También te puede interesar: Meghan Markle recibe una dura carta navideña)
A pesar de las polémicas familiares en las que se ha visto en vuelta las últimas semanas, Markle, se ve cada vez más feliz y radiante con su embarazo de cuatro meses.
De esta forma, ninguna controversia logró empañar la celebración de la familia real, la que se festejó con la clásica misa navideña realizada en la iglesia de Sandringham. A esta, Meghan acudió junto a su esposo Harry y sus cuñados, Kate Middleton y el príncipe William.
Los 4 caminaron juntos, mientras saludaban a los cientos de fans que esperaban cerca de la iglesia. Mientras que por su parte, la reina Isabel II llegó sola y, como es tradición, reflexionó sobre su ajetreado año.
«Ha sido un año activo para mi familia, con dos bodas y dos bebés y otro que se espera pronto. Esto ayuda a una abuela a estar ocupada. Hemos tenido también otras celebraciones, incluidos los 70 años del príncipe de Gales», afirmó.