A poco más de un mes desde que los partidos firmaran el «Acuerdo por la paz y una nueva Constitución» ya tan solo dos meses desde el estallido social, hoy se vota en la Sala de la Cámara de Diputados la reforma constitucional que permitirá el plebiscito y todo el proceso constituyente. La reforma al Capítulo XV de la Carta Magna, que fue elaborada por la comisión técnica, corregida y visada por los presidentes de partidos que rubricaron el acuerdo, ya fue aprobada en la comisión de Constitución de la Cámara Baja.
Sin embargo, ya en la votación de ayer se advertía que las tensiones que la misma genera y anticipa el escenario que marcará la trascendental discusión.
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Tal como se espera, esta reforma le abre el paso al plebiscito que ya tiene fecha fijada para el 26 de abril de 2020, en el que se consultará a los chilenos si quieren o no una nueva Constitución y el mecanismo para su redacción, debería aprobarse aún cuando requiere dos tercios de los votos de los diputados.
A pesar de que independientes, comunistas, ecologistas y los miembros de la Federación Regionalista Social no firmaron el «Acuerdo por la paz y una nueva Constitución», todos los otros partidos sí lo hicieron y serían suficientes para su éxito.
Los que sí deberían votar a favor de la reforma, según los cálculos, son los de Convergencia Social, partiendo por su presidenta Gael Yeomans. Además con ella deberían hacerlo Gonzalo Winter y Diego Ibáñez, pese a que solo el diputado Gabriel Boric firmó el acuerdo y no lo hizo a nombre del partido.
¿Por qué la reforma causa tanta expectación en las mujeres?
Tal como está redactado, el acuerdo asegura solo cuotas de género en las candidaturas, ya que señala que los partidos deberán seguir la normativa en base a la forma en que se eligen parlamentarios. Pero desde la oposición, esta vez sí con el respaldo de comunistas y humanistas, buscan que a través de indicaciones presentadas aparte se puedan asegurar escaños para cuotas de género, pueblos originarios e independientes.
Desde el oficialismo, esta situación ha generado una tensión entre Renovación Nacional, UDI y Evópoli. Esto, debido a que Marcela Sabat, Ximena Ossandón y Erika Olivera se cuadraron con legisladoras de centroizquierda y presentaron una indicación en la comisión para asegurar escaños para mujeres.
Sin embargo, durante la jornada de ayer, el líder de RN, Mario Desbordes, anunció que nadie de su partido la respaldará en Sala y por el contrario, sus diputados presentaron tres proyectos aparte que modifican la ley de escrutinios y elecciones que tratan los mismos temas (de hecho son prácticamente iguales en su redacción), pero apuntan «a no poner en riesgo el acuerdo».
Según el oficialismo, esto se debe a que solo debe discutirse la reforma y ningún otro tema que se relacione a ella de forma simultánea.
Cabe mencionar que la sesión de hoy inició a las 09:30 horas y debiese finalizar a las 14:30 horas. Aunque según la convocatoria de la Cámara se recalca que será hasta su total despacho, aún más considerando que el Gobierno le dio discusión inmediata, tal como acordó con los partidos.