Al hacer deporte, uno de los puntos más importantes (además de una correcta ejecución del ejercicio), es la hidratación. Si bien puede ser obvio, lo cierto es que es muy importante hidratarse, ya que al no hacerlo, se pueden perder minerales importantes para nuestro organismo.
Por eso, para mantener tu cuerpo en buena condición antes, durante y después de hacer ejercicio, hay que saber como hidratarse de la mejor manera durante este tiempo.
Puede que lo primero que pensamos al ejercitarnos es tomar agua a grandes borbotones, que luego puede provocar una sensación llamada ‘dolor de caballo’ o flato. Es un dolor abdominal que surge por acumulación de gas mientras hacemos ejercicio. Esto a veces obliga a detener la actividad, lo que nos impedirá realizar la rutina que teníamos planeada.
Pero hay una forma correcta de hidratarte durante el deporte.
Te puede interesar: Ejercicios ideales para cuidar la salud de tu espalda
¿Cuánto tomar antes, durante y después del ejercicio?
Es importante que te hidrates durante una sesión de actividad física, además de tomar agua antes y después.
De acuerdo a los expertos, se recomienda beber 400 ml de agua, una o dos horas antes de entrenar (aproximadamente dos vasos de agua). Y antes de comenzar a ejercitarte, unos 15 minutos antes, bebe 200 ml.
Sin embargo, al comenzar tu rutina, lo mejor es beber pequeños sorbos de agua, y así evitar el flato o esa incómoda sensación en tu estómago. De acuerdo al entrenador personal Ángel Merchan, la cantidad necesaria en una sesión dependerá de cada persona, lo importante es tener en cuenta evitar sorbos grandes.
Además, depende de la rutina de ejercicio. Un atleta de alto rendimiento que entra más de 60 minutos en una sesión diaria, requiere hidratación especial. Pero si vas al gym o a ejercitarte en casa, en una rutina de 30 a 60 minutos, lo idea sería beber entre 250 a 500 ml de agua.
No siempre la cantidad será igual, porque también dependerá de la temperatura ambiental, como también del tipo de ejercicio que hagas (si es cardio o localizado).
Un punto clave es evitar que te de ser para beber agua, ya que eso puede indicar deshidratación, lo que puede afectar tu rendimiento al ejercitarte.
¿Puedo tomar bebidas isotónicas?
Después de ejercitarte, las bebidas isotónicas pueden brindar carbohidratos, vitaminas y minerales que se necesitan para reponerse de una actividad física intensa, por eso son una opción dependiendo del tipo y duración de ejercicio.
¡Pero no es necesario! La nutricionista Wendy Martinson le dijo a The Globe que tomar agua es suficiente para rutinas de ejercicio que duran menos de 60 minutos. En el caso de deportistas profesionales, que entrenan por períodos más largos y varias veces al día durante la semana, sí es recomendable.
No está demás decir que tomar agua no solo es importante al ejercitarte, sino que también en tu día a día, ya que ayudará a tu metabolismo y a tu organismo a nivel completo.