Como ya es tradición, cada año la Revista Sábado de El Mercurio elige a 100 jóvenes líderes quienes destacan en distintas disciplinas. Educación, deportes, música, política o ciencia son algunos de los ámbitos en que se desenvuelven estas personalidades. Y en ese contexto, un nombre conocido llamó la atención.
Estamos hablando de Rafaela Vicuña Moraga, sobrina del actor Benjamín Vicuña, y una joven promesa de la música. A sus 18 años, la adolescente brilla tocando el violonchelo y cuenta con una prometedora carrera en el extranjero.
Fue a los 6 años que Rafaela, hija de Juan Pablo Vicuña, hermano del actor, comenzó su camino en la música. Al dominar su instrumento, se incorporó a la Orquesta Juvenil de la Corporación Cultural de Lo Barnechea. Luego siguió su camino en el Conservatorio y el Instituto de las Artes Superiores de la Universidad de Chile.
“A los 12 años entré a estudiar al Conservatorio de la Universidad de Chile para comenzar a formarme de una manera profesional en lo que es el violoncello, por lo tanto tuve que dejar de lado el colegio y optar por colegios con enseñanzas alternativas diseñadas para artistas y deportistas de élite”, detalló la sobrina de Benjamín a Revista Sábado.
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El gran salto de Rafaela Vicuña
Si bien a lo largo de su corta carrera musical Vicuña ha recibido importantes reconocimientos en Chile y el extranjero, probablemente el más importante ha sido ser seleccionada en el Conservatorio de Música Rueil-Malmaison, en Francia.
A sus 17 años Rafaela dejó su hogar para comenzar una nueva vida en otro país, convirtiéndose en la chilena más joven en formar parte del prestigioso conservatorio.
“El director del conservatorio me ofreció guardarme el puesto como alumna por mientras que terminaba mis estudios secundarios y tramitaba mi visa en Chile, así que lo tomé. Fue una difícil decisión para mi familia y un gran esfuerzo que me hayan dejado vivir sola a los 17 años a miles de kilómetros de ellos, pero sabían que era lo correcto”, agregó la joven.
“Cuando toco el chelo, hago lo que más me gusta, le pongo muchas ganas y energía, porque lo hago con pasión y constancia”, afirmó Vicuña.
Cabe señalar que debido a la pandemia por coronavirus, Rafaela no pudo cambiar el estatus de su visa y por lo mismo, no ha podido trabajar para pagar sus estudios y lo que necesita. En ese contexto, la joven lanzó una campaña en sus redes sociales para recaudar 5 mil euros (4 millones y medio de pesos apróx) y así continuar con sus estudios de música.