El día de ayer, la animadora Raquel Argandoña sorprendió a sus seguidores de Instagram con un relato de su vida personal.
Y es que el rostro de televisión hizo una reflexión en base a sus primeros años de vida, cuando residía junto a su familia en la comuna de Recoleta.
«Cuando todo se me pone cuesta arriba, me hace bien recordar de dónde vengo, de calle Purísima», comenzó el relato.
«Vivía junto a mis padres y hermana, una casa arrendada que mi padre con mucho trabajo pagaba. Éramos humildes, pero mis padres nos enseñaron principios y valores, que si te esfuerzas y trabajas puedes lograr lo que sueñas», añadió la comunicadora de 63 años.
Sus comienzos
En la imagen se puede ver una casa, que Raquel Argandoña marcó para mostrarle a sus seguidores la casa donde creció y vivió sus primeros años de vida.
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«Si una vez pudiste superar obstáculos en tu vida, volverás a hacerlo, aunque creas que ya no puedas más. Trato de superarme a diario y de aprender lo que en mi infancia no pude, había que trabajar y estudiar», recordó Argandoña, quien también aseguró estar «orgullosa de su pasado».
«Me hizo una mujer aguerrida, trabajadora, directa, que a muchos quizás no les gusta», añadió.. en la publicación junto a una foto de la casa de su infancia.
«Quería compartir esto con ustedes porque muchas veces todo lo que nos pasa, es lo que nos hace más fuertes, cada herida y cada cicatriz nos hace resilientes. Nunca me avergonzaré de dónde vengo, de mi pasado y de todos los que creyeron en mí», añadió.
Para finalizar, dejo una potente reflexión sobre las adversidades que a veces pueden vivir las personas: «Recuerda que aunque tengas el mundo cuesta arriba, siempre en algún minuto sale el sol».