Sigue la polémica en la familia real británica tras la entrevista que Meghan Markle y el príncipe Harry concedieron a la animadora Oprah Winfrey. De hecho la reina Isabel II tomó varias decisiones a raíz de esto.
Esta es la segunda declaración que hace la monarca respecto a lo expresado por los duques de Sussex.
En un primer comunicado oficial, la reina dijo sentirse «apenada» por la situación vivida por Meghan mientras fue parte de la familia real británica.
No obstante, la reina Isabel II, en esta oportunidad se refirió a las acusaciones que hizo Meghan Markle sobre que su hijo Archie sufrió de comentarios racista antes de nacer.
Por esta razón, la monarca de 94 años, solicitó que sean revisadas todas las políticas de diversidad, que hay actualmente al interior de la monarquía británica.
Esto como medida a la hora de contratar personal que trabaje para la monarquía. Ya sea del Palacio de Buckingham, Clarence House y el Palacio de Kensington.
Un trabajador de la casa real informó al medio Mail on Sunday, que «Ya existen las políticas, los procedimientos y los programas, pero no hemos visto el progreso que nos hubiera gustado ver y aceptamos la necesidad de hacer más y mejorar las cosas».
Los dichos de los duques de Sussex
El domingo siete de marzo se estrenó la polémica entrevista de Meghan y Harry, donde Meghan admitió que su hijo sufrió de un ataque racista por parte de alguien al interior de la monarquía.
Eso sí dejó claro que estos ataques no venían ni de la reina Isabel II ni del príncipe Philippe. Lo que sí no dijo si era de otro miembro de la familia o de los trabajadores.
«Durante mi embarazo en la familia se hablaba sobre cuán oscura sería su piel», expresó Meghan en esa oportunidad.