Este sábado 4 de septiembre tendremos que adelantar los relojes en una hora, de modo que ese día en la noche; a las 00:00 horas, habrá que poner la 1:00 de la madrugada. Así comenzará el horario de verano, cambio que tiene como propósito buscar que el sol se oculte más tarde en los meses de verano.
Los cambios de horario, tanto en invierno como en verano acostumbran a generan controversia en la población; pues hay personas que prefiere el horario de invierno mientras que otras el que permite tener más luz por la tarde.
Es importante considerar que esta modificación en el horario también podría traer consecuencias a nuestra salud, así lo afirma la Dra. Evelyn Benavides, neuróloga del Programa de Medicina del Sueño de Clínica Universidad de los Andes
Entre los síntomas más comunes que nos puede dejar este cambio de hora; se encuentra la somnolencia e irritabilidad; el motivo de esto según la doctora Evelyn: ‘’esto ocurre porque se alteran los ritmos habituales pero no es motivo para preocuparse ya que ‘’suelen resolverse en dos o tres días sin más repercusión.’’
Por el contrario, las personas que se podrían ver más afectadas por esta modificación son las que han tenido problemas de sueño atribuidas a la pandemia ‘’o a otras condiciones médicas; como insomnio o los síndromes de adelanto de fase y de apnea del sueño’’ agrega la doctora.
Esto podría traer problemas, específicamente en verano, época en que se suelen realizar más actividades por las tardes ‘’lo ideal para dormir mejor es siempre estar más activos en las mañanas, no al final del día”.
Recomendaciones:
Para adaptarse más fácilmente al cambio, agrega, no hay que pensar en la hora que sería el día anterior, sino aprovechar el nuevo horario para realizar las actividades cotidianas, tratando de dormirse unos 30 minutos antes de lo habitual los días previos para que la falta de una hora no sea tan notoria en la calidad de las actividades de los días siguientes
Sin embargo, la recomendación más importante corresponde a mantener hábitos saludables no sólo durante la época de verano, sino que durante todo el año. Esto podría mejorar la calidad de vida de las personas y también disminuir el riesgo de algunas enfermedades metabólicas y cardiovasculares.
¿Cómo evitar los efectos negativos del cambio de hora?
- Mantener un horario estable para despertarse y levantarse de la cama de inmediato.
- No quedarse leyendo el diario ni tomar desayuno en la cama.
- No recurrir a estimulantes como café, bebidas, nicotina, té, cacao y alcohol después de las 17:00 h.
- Evitar la automedicación de fármacos inductores del sueño, ya que los malestares que puede generar el cambio horario podrían aumentar.
- Tratar de no ver TV en la cama, idealmente sacar el televisor del dormitorio.
- Evitar resolver problemas y planificar actividades en los momentos previos a acostarse o en la cama. Si se tiene cosas pendientes, dejarlas anotadas antes de irse a dormir.
- Evitar comidas abundantes y excesivamente condimentadas.
- Procurar un ambiente silencioso, oscuro y con temperatura agradablemente baja (16 a 20°C en el dormitorio).
- Si se despierta en la noche, no mirar la hora, ni prender la luz, sólo darse vuelta e
intentar conciliar nuevamente el sueño.