Con la llegada de la pandemia, fueron muchas las personas que sufrieron estrés o crisis al estar encerrados en sus casas. Y es el miedo, la incertidumbre y el constante estrés de no saber si podías contagiarte o no hizo que varias personas sufrieran de colon irritable.
Pues la enfermedad ha estado en aumento durante el transcurso del Siglo XXI y se ha visto tanto en adultos como en niños. Es por eso, que esta mañana en el programa Panorama Imagina, conversamos con el Doctor Christian von Mühlenbrock, gastroenterólogo de la Clínica Universidad de los Andes.
El colon irritable en la población
Frente a la pregunta sobre el aumento en la población que padece o piensa que tiene colon irritable, el doctor afirmó «cada vez es más frecuente y, al fin y al cabo, nos afecta a todos y afecta mucho la calidad de vida. Cada vez será más frecuente porque es debido al estrés, la mala alimentación».
Respecto a los síntomas en el cuerpo para saber si tienes colon irritable o no, el doctor afirma que lo típico es un dolor crónico abdominal y tiene que ser por lo menos 6 meses. No es un dolor de la noche a la mañana para asociarlo y que habitualmente se asocia a algún cambio del tránsito.
Eso quiere decir que si sufres dolor crónico y tu transito no es normal, puedes estar frente al colon irritable. El dolor puede aparecer en cualquier parte del abdomen, no hay un lugar específico en que aparezca y se sepa. Por eso, recomienda siempre ir al doctor para saber la verdad.
Algunos mitos sobre la enfermedad
Con relación a los mitos sobres algunos alimentos, Christian es bien enfático. «No hay alimentos específicos que dañen la zona y provoquen la hinchazón del abdomen. Sin embargo, algunos azúcares si pueden acelerar y comenzar el dolor en la zona».
Además, habla que la intolerancia a la lactosa va de la mano con el colon irritable. «Es como la diabetes, si un enfermo come azúcar sabe que, en un par de horas, el azúcar le subirá y se sentirá mal. En este caso pasa lo mismo, por lo que, si uno tiene el colon irritable, no hay que comer alimentos con lactosa».
Finalmente, el gastroenterólogo de la Clínica Universidad de los Andes afirma que las emociones tienen mucho que ver en cómo se comporta el cuerpo «el intestino es un cerebro aparte porque estamos rodeados de neuronas y cada vez que tenemos algún problema, aumenta el estrés u otra emoción y eso hace que se contraiga, que funcione más rápido».
«Por eso uno siente dolor cuando está estresado. Es lo normal, está comunicado el cerebro con el intestino» termina explicando el Doctor Christian von Mühlenbrock.
Te puede interesar: «Yo lo pase mal en un momento»: Katherine Salosny se sinceró respecto a su nuevo estilo de vida