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Este viernes el papa Francisco acudió personalmente a la embajada de Rusia, para así poder hablar con el representante diplomático, Alexander Avdeev. Pues necesitaba demostrar su preocupación de alguna forma.
De hecho, lo que impactó es que el pontífice estuvo por más de media hora hablando en la sede diplomática de Vía della Conciliazione 10, a metros de Plaza San Pedro. De hecho, ayer públicamente había pedido que se parara la guerra.
Después de esta pequeña reunión, se confirmó que el embajador de Rusia estaría planificando el segundo encuentro con Francisco. Además de que le prometió mantenerlo informado sobre el conflicto con Ucrania.
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Durante los 30 minutos que duró la reunión, básicamente el papa demostró toda su preocupación sobre la violencia que se está ejerciendo sobre Ucrania. Esto es según lo que dijo la oficina de prensa vaticana.
Sin embargo, aseguró que era un intento por parte del papa de «mediar» en la situación, si no, que más bien solo fue a mostrar su preocupación. Por lo que, el papa Francisco hizo esta visita para intentar dialogar con su Alexander Avdeev, quién es su amigo cercano hace ya un par de años.
Luego de que Rusia invadiera Ucrania, el Vaticano emitió una declaración del secretario de Estado, Pietro Parolin. Aquí aseguró que «aún hay tiempo para dialogar», además de que hay que evitar «los horrores de la guerra».
«Aún hay tiempo para la buena voluntad, aún espacio la negociación, aún hay lugar para el ejercicio de una sabiduría que impida que prevalezcan los intereses partidistas, proteja las legítimas de cada uno y salve al mundo de la locura y los horrores de la guerra», finalizó.