Los perros son parte de nuestra familia y, por ello, requieren ciertos cuidados en su comida para garantizar su optimo estado de salud. Ya sea por desconocimiento o simplemente porque empatizamos con su cara de ternura, muchas veces nos excedemos en la cantidad de alimento diaria que les damos a nuestros canes.
Esta situación más de alguna vez nos ha generado interrogantes que simplemente no sabemos responder. ¿Le di demasiada comida a mi perro? ¿Necesitará más? ¿Pasará algo si le doy más?
Pues bien, ante aquellas posibles incógnitas, recientemente un estudio publicado por la revista GeroScience se propuso comenzar a resolverlas. La investigación analizó la relación entre la salud canina y la alimentación de más de 10 mil perros, tomando en cuenta factores como el sexo, edad, raza y tamaño.
¿Cuánta comida debo darle a mi perro al día?
A través del estudio, se pudo revelar que aquellos canes que solían ser alimentados con mayor frecuencia, estaban expuestos a sufrir mayores problemas de salud. Respecto a la cantidad de comida diaria que se recomienda para nuestros perros, el informe concluyó que lo más adecuado es darles únicamente una ración.
Según los expertos, aquellos perros adultos que son alimentados en solo una oportunidad al día, obtienen una mejor puntuación en variados indicadores de salud. Situación que se contrapone a aquellos canes que comen en más ocasiones durante la misma jornada.
La autora de la investigación, Emily Bray, se refirió a esta importante conclusión. “Controlando el sexo, la edad, la raza y otros posibles factores de confusión, descubrimos que, a diferencia de los perros alimentados con frecuencia, los que comían una vez al día tenían puntuaciones más bajas en una escala de disfunción cognitiva”, afirmó.
De igual forma, Bray subrayó otra ventaja que tendrían los canes a los que se les daba comida solo una vez por día. Según la experta, estos últimos tenían menos probabilidades de sufrir trastornos dentales, gastrointestinales, renales/urinarios, ortopédicos y hepáticos/pancreáticos.
Las limitaciones de la investigación
El equipo a cargo del estudio marcó un precedente en esta área. Sin embargo, el proceso investigativo tuvo ciertas limitaciones. Por ejemplo, no se tomó en cuenta si los canes tomaban medicamentos. Asimismo, solo fueron considerados aquellos perros que eran alimentados con comida por sus dueños.
Por otro lado, el estudio no tuvo datos significativos sobre la incidencia de la cantidad de alimento respecto al cáncer o cambios en la salud cardiaca, cutánea y/o neurológica del can. Por ello y pese a lo auspicioso que puede ser contar con este tipo de información, la recomendación es no cambiar repentinamente los hábitos de comida de nuestros perros y mascotas en general.
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