El corazón roto trasciende lo emocional. Las personas tienden a asociar el estrés a problemáticas en el trabajo, a la aceleración de la vida en general, o incluso al tráfico de vehículos en la ciudad. Sin embargo, una experiencia de desamor también provoca altos niveles de estrés en las personas. Por lo que puede generar una serie de inconvenientes tanto en nuestra salud mental como física.
Así lo demuestran diversas investigaciones que evidencian que este mecanismo puede producir una serie de efectos dañinos en la salud a corto, mediano y largo plazo. Por ejemplo, el estudio estadounidense JAMA Network Open publicado en marzo de este año, reveló que las personas con altos niveles de estrés tienen más probabilidades de sufrir un deterioro de la función cognitiva. Esto afecta a su capacidad de recordar, concentrarse y aprender cosas nuevas. Asimismo, tienen más posibilidades de presentar factores de riesgo cardiovascular no controlados y un estilo de vida poco saludable. Esto ocurre debido a que la exposición a situaciones altamente demandantes emocionalmente aumenta los niveles de cortisol y en efecto puede alterar diferentes funciones de nuestro organismo.
Como terapeuta acompañando a personas en sus procesos post quiebre, ha podido observar cómo la experiencia del desamor puede causar graves estragos en la vida de las personas. Y esto no sólo se limita a los sentimientos relacionados directamente al quiebre en términos románticos. Igualmente, extiende sus efectos a dimensiones familiares, económicos, judiciales, de proyectos de vida, entre otros aspectos importantes.
Dependiendo del perfil psicológico de cada persona, el afrontar un quiebre amoroso puede también llegar a ser causa de episodios depresivos, crisis de ansiedad, ideaciones o intentos de suicidio. Por todas estas razones, el término de una relación de pareja es un tema que afecta a la salud mental y que por tanto debiera ser abordado con toda seriedad y multidisciplinariamente, con el apoyo de psicólogos, médicos e incluso abogados y trabajadores sociales.
El estrés puede causar el síndrome del corazón roto
El síndrome del corazón roto es una afección cardíaca que a menudo se produce en situaciones estresantes y emociones extremas. Por lo que el término de una relación de pareja sí podría ser la causante de este síndrome. Sin embargo, todo va a depender de las circunstancias en que la relación llegó a su término. Entre ellas, por ejemplo: infidelidades, violencia física o psicológica o manipulaciones.
Un estudio publicado por la revista Journal of American Society of Echocardiography reveló cómo afecta al corazón. Según los científicos a cargo de la investigación, este tipo de situaciones pueden generar que algunas partes del corazón se llenen de pequeñas fisuras. Dichas lesiones que hacen que el músculo pierda elasticidad y que no se contraiga correctamente. Así lo dedujeron luego de analizar durante 4 meses a 52 pacientes que sufrieron la miocardiopatía de Takotsubo o síndrome del corazón roto
En algunos casos, los daños en las personas podrían ser de larga duración o incluso irreversibles. Si bien por lo general las heridas cicatrizan los días posteriores. Por lo que el llamado es estar atento a las señales de alerta post término. Porque, aun cuando parezca impensado para algunas personas, un quiebre amoroso bien pudiera causar un problema de salud que requiera de asistencia médica.
El camino de la sanación
El proceso posterior al término de una relación de pareja es una de las experiencias más dolorosas que podemos pasar los seres humanos. En estos casos es recomendable que las personas aborden el proceso de desamor. Tanto como un problema de salud mental como física. De esta manera, hay que considerar buscar ayuda profesional médica y psicológica, en el caso que sea necesario.
Por Hugo Huerta, psicólogo especialista en Trauma Complejo del Desarrollo