En tiempos pasados, Semana Santa era un período de reflexión y devoción, donde las actividades religiosas ocupaban el centro de la atención. Sin embargo, en la actualidad, muchas personas optan por vacaciones y actividades entretenidas.
Recuerdo cuando era chica no me gustaba mucho que llegara esta fecha, primero porque estaba llena de restricciones y segundo porque al estar en colegio católico tenía que participar en obras de teatro y representaciones donde por lo general me vestían de hombre con barba. (nunca logre ser María jajaja).
La Semana Santa de antes
En el tema de “imposibilidades” las que lideraban la facultad de decirme “no se hace eso” era la Doris, mi nanita de toda la vida y mi abuela de origen español… ambas católicas acérrimas.
Entonces si cantaba me hacían callar, si bailaba, me decían que cómo se me ocurría, si nos reíamos más fuerte con mis hermanos, también nos llegaba el sermón de que: “Respetáramos lo que Jesús hizo por nosotros y que pensáramos en ese acto hermoso”, o sea nos pedían reflexionar, cosa que no hacíamos y las “pelábamos” diciendo que estaban algo locas.
En la actualidad no pasa nada de eso, todo lo contrario lo “cool” es irse de vacaciones, relajarse, juntarse con los amigos o dedicarse a la “vida del oso, sin mover un dedo, para maratonear series”. En lo que sí me detengo es en el festín marino en el que todos piensan nadie se lo pierde y eso que la idea de comer pescado es porque se suponía que es un alimento más austero y liviano que la carne… ni siquiera voy a hablar de los kilos de chocolate que comen los niños en forma de huevitos.
Hoy le haré un guiño recordando cómo se vivía la Semana Santa, cuando era harto más SANTA.
¿Cómo es ahora?: Había una vez…
La Semana Santa marca la conmemoración de la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret. Durante este tiempo, se llevan a cabo intensas actividades litúrgicas en la tradición católica, donde los fieles encuentran la oportunidad de revivir los eventos cruciales de su fe, renovar sus compromisos cristianos. Asimismo, busca representa los últimos días de la vida de Cristo y su posterior resurrección, siendo un período de reflexión y devoción para los creyentes en todo el mundo.
DATO: En Chile, un 48% se declara católico, un 17% evangélico y un 30% no profesa ninguna religión, según la Encuesta Bicentenario.
Uno de los hitos relevantes que se genera en la “CUARESMA” es el Miércoles de Ceniza, (se calcula contando hacia atrás 46 días desde el Domingo de Resurrección (Pascua). El Domingo de Resurrección es el primer domingo después de la primera luna llena después del equinoccio de primavera en el hemisferio norte.
En esa misa a los fieles se les marca con cenizas una cruz en la frente (simbolismo, del sentimiento de arrepentimiento por los pecados que se han cometido). Ese día el sacerdote dice la célebre frase: “Acuérdate, hombre, que de polvo eres y en polvo te convertirás”.
Muchos días posteriores se conmemora el Jueves Santo, se recuerda la Última Cena y el acto de humildad de Jesús al lavar los pies de manera humilde a sus apóstoles. El Viernes de Pasión, se conmemora la pasión de Cristo, así como su crucifixión y, finalmente, su muerte. Se da paso al Sábado Santo.
También llamado Sábado de Gloria, el Sábado Santo o Vigilia Pascual, que representa la antesala a la celebración más importante del cristianismo, que es el Domingo de Resurrección, luego de que Jesús tres días estuviera fallecido.
Lo que pasaba antes …
- Las radios solo tocaban música clásica.
- No se podía hablar en voz tan alta, tampoco bailar, reír ni hacer juegos infantiles. No se podían pronunciar “garabatos o malas palabras” de hecho se arriesgaba reto o castigo (en casos más severos).
- No se ingerían bebidas alcohólicas ni se asistía a fiestas En la televisión, la que se dedicaba a emitir una y otra vez películas relacionadas con la festividad: ‘Los 10 Mandamientos’, ‘La Biblia’, ‘Barrabás’ y ‘El manto sagrado’, Ben Hur, Espartaco, Jesús de Nazareth, Quo Vadis En estos últimos tiempos “la Pasión de Cristo” más moderna, entre otras.
- Las jornadas de recogimiento implicaban actividades de iglesia. Se asistía a misa, al Viacrucis y sólo se comían pescados (los mariscos tampoco eran muy protagónico, solo los que estuviesen al alcance y por lo general eran en conserva).
- Las parejas no podían tener relaciones sexuales, pues se juzgaba como un acto ligado al placer y frívolo, alejado a la introspección solicitada. Existía el mito que podían quedar pegados hasta el domingo en castigo.
- Muchas mujeres el Viernes Santo se vestían de duelo o medio duelo, ya que si se usaba ropa roja era identificarse con el demonio. También se decía que no había que bañarse, ya que de lo contrario las personas se podían convertir en pescados o sirenas.
- No clavar clavos: muchos fieles evitan hacer esto el Viernes Santo porque consideran que representa el sufrimiento de Jesús en la cruz.
- Tampoco se hacía aseo pasar la escoba, se consideraba una forma de «barrer la cara de Cristo».
- No cortar nada ya que era un acto similar a estar cortando el cuerpo de Jesús. No jugar juegos de azar
- El comercio no abría, tampoco los cines y teatros a no ser para mostrar obras de “Jesucristo Superestrella”
- No salir después de las 3 de la tarde: Jesús murió a las 3 de la tarde, desatando la ira de Dios. Es por esto que salir el viernes después de esa hora podría enojar al Creador.
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