Sabine Moussier, la destacada actriz mexicana reconocida por interpretar roles de villana en las telenovelas de Televisa, se sinceró en el reality show «La Casa de los Famosos», donde entregó detalles del tormentoso matrimonio que mantuvo con el empresario chileno, Jorge Peralta Casal.
«Mi exesposo era súper celoso, yo vivía en Cuernavaca. No podía tomar clases de ejercicios porque me veían los hombres, a menos que apoyara una mujer», comenzó relatando la interprete a sus compañeros de encierro. «Tenía que estar vestida de acá (cuello y piernas) tapado. Ya después, me dejó como abrir un poco la camisa», agregó.
En este sentido, recordó un episodio cuando intentó asistir a un gimnasio con mujeres: «Una vez me salí de la casa a media noche, dije no, no sé y me fui. Pero yo no era muy brava en ese entonces, pero ya empezaba a no dejarme».
Sobre su matrimonio, Sabine reveló que estuvo cuatro años casa y solo fueron dos de convivencia:«Yo me fui de la casa, saqué mis cosas, pero él no me lo quería dar (divorcio), hasta que el papá le dijo que sí, fue y me lo pidió», aseguró la actriz.
¿Lo sacó de la cárcel?
Tras sus dichos, la prensa revivió otras declaraciones que hizo la actriz mexicana durante el año pasado, donde aseguraba que lo había sacado de prisión solo por ser padre de sus hijos, Camila y Paulo.
Según los propios dichos de Sabine Moussier, el matrimonio estuvo marcado por los engaños y la violencia, pues el chileno no era un empresario y debido a esto enfrentaron varios problemas económicos, los que se agudizaron con las agresiones del chileno.
«El dolor es por mis hijos, nos separamos después de que bautizamos a mi hijo (2008), unos meses después. Él hizo su vida, yo la mía. Y luego, él metió mucho las patas, hizo cosas muy fuertes y feas, a él lo encarcelaron», señaló en Secretos de Villanas, asegurando que había sido por fraude a muchas personas, entre ellas, la propia actriz.
«Se vivió mucha violencia y se vieron muchas cosas… lo saqué porque tengo hijos, y porque soy una persona pública, no podía permitir que nadie les dijera nada en la escuela a mis hijos, yo quería que ellos pudieran ver siempre a los ojos y de frente a quien fuera», cerró en el espacio.